CAPITULO VI

EN LA MISMA VEREDA. VI En una mañana fría y neblinosa, donde a duras penas se podía ver de lejos, la profesora de estadística llegó a la universidad más lujosa y más cara de Lima. Estacionó su coche en el lugar permitido para todos los docentes. La profesora Karina Márquez, la más temida por todos los universitarios por su rectitud y por su cara de muy pocos amigos, sobre todo, a la hora de calificar los exámenes. Con su maletín de cuero negro y la mirada despectiva caminaba por toda la facultad de administración, haciendo la parada en la cafetería de dicha facultad. Lugar de refugio y de “entrenamiento” para luego entrar al salón de clase y dictar sus temas como si fuera un campo de batalla. Mujer de muy pocos amigos, aunque fuesen colegas. Prefería la distancia, así no llegar a distraerse y no perder el tiempo en temas vagos e irrelevantes. Sentada en la cafetería, revisaba los exámenes muy minuciosamente, tenía un cigarrillo en la mano que hacía juego con una tasa de café, movía la ...