DORA Y KUKA.

UN HOMBRE DE BUENA FE. DORA Y KUKA. Soy un desastre con mis cosas. Mejor dicho: soy un desordenado con mis cosas. Tengo papeles tirados por todas partes, documentos importantes que viven en mi cocina; mis horarios y los papeles del trabajo cenan conmigo todos los días, en fin… ya me acostumbré a vivir así en un desorden total. Y, paradójicamente, en ese total desorden, yo encuentro mi orden, es como si ya mi desorden fuera mi orden, un orden donde me hallo todos los días. Qué más me da… como solía decirme mi madre: allá tú, hijo, allá tú. No me gusta bañarme en las mañanas. Usualmente lo hago por las noches y con agua caliente. Mi ropa está por todas partes de mi departamento y los cerros de pantalones ya viven en mi cuarto. No tomo desayuno, lo detesto. Será por eso que mi úlcera está creciendo como la grieta de un temblor. Sufro del hígado y sufro de amores olvidados y perdidos por el tiempo. No veo las noticias, las detesto. Mis depresiones van por ahí. No puedo soportar ver o leer ...